Había una vez en la tierra, tres hermanos, sus nombres eran PASADO, PRESENTE y FUTURO. Desde sus nacimientos los tres vivieron separados, tanto así, que no se vieron y conocieron. Lo que sabían de ellos era, que PASADO era retrasado, PRESENTE era muy puntual, y el otro, demasiado acelerado. Ninguno lograba alcanzarse, por eso siempre estuvieron separados. Un día, PRESENTE se le ocurrió la brillante idea de querer conocer a sus hermanos, para ello, pensó realizar una celebración donde los tres coincidieran y mirarse por primera vez así fuera de lejos. Recorriendo la tierra en búsqueda de esa celebración, encontró la navidad, ya que, por lo que vio, era la única fiesta que se celebraba en todos los rincones de la tierra. Como era su idea, y no hallaba como comunicársela a sus hermanos, entonces espero, la fecha de la navidad…, cando llegó, él sabía que le restaba un largo y agotador día, para realizar el tan inesperado encuentro, entonces esperó y es...
"Yo no me doy por Vencido" esta expresión pareciera trillada lo digo porque todos alguna vez lo han escuchado y más aún la han pronunciado, pero recuerdan por que? bueno, la verdad es que pareciera en ocasiones una frase con una pizca de soberbia y lo digo porque a veces la utilizamos con Dios, aunque la entendemos de esa manera cuando sentimos que no estamos aptos delante de El para decir semejante expresión, sin embargo solo la respuesta que obtengamos determinará si esta siendo utilizada adecuadamente pero también hay que tener presente que es más por su Gran Misericordia que por merecimiento a recibir lo que estamos pidiendo con tal actitud...
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