Si la navidad fuera solo una época, los días quedarían cortos. Si la navidad fuera solo alegrías, mis lágrimas quedarían tristes. Si la navidad fuera solo compartir mi soledad no querría acompañarlo. Si la navidad fuera solo perdonar mi rencor quedaría de lado. Si la navidad fuera solo regalos, mi ser extrañaría los abrazos. Si la navidad fuera solo este año, todos los demás quedarían lamentándose de lo que habían reunido y que no podrán dar. Por eso, no tengas temor de dar todo lo que tienes (amor, perdón, abrazos, consejos, sabiduría) porque mejor es dar, que guardar para después lo que no sabes si servirá, porque también ello tiene fecha de vencimiento y de utilidad, ya que lo oportuno siempre va acompañado del presente y esperado por el futuro.