La navidad es una época que
permite aflorar en muchas personas lo mejor de sí, lo bueno que está en las
profundidades del alma, mente y corazón, aquello que ha quedado sepultado por
los afanes y problemas de la cotidianidad, pero que en esta época necesita resucitar
y mostrarse vivo, siendo esto, en ocasiones uno de los motores propulsores que
permita tanto a la persona que lo experimenta y siente, como a la
que recibe las bondades de ese bien, a seguir un año más, con nuevas fuerzas,
esperanzado a pesar de las circunstancia.
Imagínense entonces, lo que
lograríamos si nos sensibilizáramos e hiciéramos lo bueno no solo en una época
sino todos los días de nuestra existencia, cuántas cargas se nos alivianara y
alivianaríamos la de los demás. Por eso, no seas de las personas que
esperan lo último, porque esto es lo que reflejan, cuando solo
hacen el bien en el mes último del año y aun más, en los últimos días de ese
año.
Sé que no es fácil dejar de hacerlo de esta manera, pero la práctica cada
día demuestra que es posible, y si necesitas la navidad para hacer el bien,
recuerda que no hay un documento o decreto valido que señale ni el inicio ni el final de la
navidad, por tanto siempre será navidad, porque eres tu quien le da fecha de
inicio y culminación con tus actitudes y acciones.
Por eso todos los días te desearé en mi mente
y corazón que tengas una Feliz Navidad!
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